No me dejaste nada...

No me dejaste nada,  
me arrojaste a un vació profundo
de infinita obscuridad y tristeza,
me quitaste lo único que me quedaba de ti,
el único aroma que me llegaba,
él único rayo de sol que entraba por mi ventana.
Te llevaste todas mis lágrimas,
he quedado desvanecida
sobre las sábanas humedecidas
de tanto llorarte.
Arrasaste con mi jardín de margaritas
no me dejaste ni un pétalo
que me diga que me quieres.
Tan malo fue el amor que te di,
que te evaporaste como el viento.
Tanto me pude haber equivocado
al leer tus versos.
Todavía recuerdo noviembre,
todavía se sienten tibios,
ese abrazo y ese beso...
Fue como un sello de amor,
saliva; lágrimas; pasión,
donde la dulzura se entremezclo,
y ese coro de ángeles
volvió a cantar su mejor canción.
Me metí de nuevo en tus ojos,
toque de nuevo tu alma,
me abrí paso hasta tu corazón,
y ahí me quede clavada.
Así estas grabado a fuego en el mio,
jamás habrá olvido o distancia,
que pueda con este amor...
Nunca podrás desactivar,
esa parte de mi que hay en vos,
porque corro por tu sangre,
y vivo en cada canción.

© by Eleo
09/03/2012