Camino de espaldas
hacia un lugar desconocido...
Donde no hay noches; ni hay días,
solo un vacío eterno,
la prisión de mis propias circunstancias.
La psicodelia de mi locura extrema,
un laberinto de masa encefálica,
por cuyas paredes me resbalo
al querer escapar...
Ser yo en estado puro, no es fácil,
descontaminarme es agotador...
Mi alma se manifiesta
de mil maneras diferentes...
Debo cambiar el foco de mi mirada
para ver lo que no tiene forma,
la desmaterialización completa de la realidad.
Crear un camino alternativo,
entre lo existencial y lo irreal,
por donde los sueños puedan transitar...
Encontrar ese equilibrio,
el color perfecto de mi aura,
esa luz interna que todos anhelamos...
Buscamos la perfección del cuerpo,
y no del alma...
Así nuestro espíritu,
se desvanece,
hasta quedar convertido en nada...
En esa nada que nos sumerge,
en un absoluta e irreparable tristeza.
© by Eleo 22/01/2012